La menopausia es la etapa en la que la mujer deja de menstruar. Puede suceder en cualquier momento entre los 40 y los 59 años. Los ovarios dejan de producir estrógenos y progesterona, hormonas encargadas de regular el ciclo menstrual.

Es una época de muchos cambios físicos y emocionales. Aunque no todas las mujeres los experimentan de la misma forma, todas ellas tienen que enfrentarse a una etapa de adaptación y de situaciones inesperadas que hará que tengan que conocerse de nuevo.

La menopausia produce cambios en el metabolismo de las mujeres por lo que normalmente produce un aumento de peso. También, reduce la capacidad de quema de calorías y aumenta el nivel de colesterol.

En esta etapa la grasa corporal se mueve y se distribuye en otras zonas, sobre todo en el abdomen y los glúteos.

La piel también sufre cambios en esta etapa. Los niveles de colágeno disminuyen al compás del estrógeno y esto hace que aparezcan arrugas y manchas en el rostro.

Así mismo los cambios hormonales que se producen también repercuten en el cabello. Se produce una perdida considerable del mismo en todo el cuerpo. Sobre todo en las patillas, el labio superior y el cuello.

Obviamente, una de las zonas más afectadas es el aparato reproductor. Es uno de los que parece tener más difícil solución y que más suele incomodar a las mujeres. Se atrofian los tejidos de la zona aumentando el riesgo de inflamación, pudiendo generar infecciones más fácilmente, incontinencia urinaria y sequedad vaginal.

Pero, todavía no te lleves las manos a la cabeza ni comiences a hiperventilar del agobio. Este ultimo problema puede solucionarse fácilmente en Anthea. En la clínica las profesionales utilizarán la radiofrecuencia Exilis Ultra Femme 360º que se puede completar con infiltración de ácido hialurónico y aplicación de EFG (factores de crecimiento epidérmico).

Así que no te lo pienses más, ponte en manos de profesionales y consigue cambiar tu vida.